jueves, 23 de julio de 2009

BESTIDURA. 24-7-09

Te vistes con la piel
de un leopardo
para definir
la voracidad
de tu apetito,
y la mirada
felina
que ostentas
te asusta
cuando la ves reflejada
en los ojos perplejos
de tu presa.
Y es que no encuentras
la manera exacta
de distinguir
tu deseo
de lo que desearías
desear
y construyes tu dominio
en la vulnerabilidad
de lo indefinido
del miedo.
Y luego de cada conquista
exhibes
tu corazón ennegrecido
como trofeo
a veces suplicando
la indulgencia
que tus garras
no pudieron
conceder.
Y en el abrir y cerrar
de tus mandíbulas
te proyectas sin alma
y te aventuras
a murmurar
un deseo
que de cumplirse
te tendría como presa
y a aquella que lo fuera
como tu perpetrador.


CINTIA CEBALLOS

miércoles, 15 de julio de 2009

ATAVISMOS. 15-07-09

Atraviesas el pantano
con la displicencia
y la incoherencia
de un buen sueño,
como el choque inefable
de dos masas,
acrobáticos cuerpos
enredados en el desorden
vertical
de un telón.
Te abres y muestras
la escena
en el tiempo
que te toma
pestañear
y con cálidos
prevaleces
los fríos
que me seducen
más
como espectadora
y artífice.
Me prometes
el despliegue
y la mutación
inadvertida
y caigo
en el embrujo
de tu mente,
no sin antes
pedirte
el sometimiento
y la concreción
del acto
que nunca
concretas.

Cintia Ceballos

martes, 14 de julio de 2009

A BRI LO. 14-06-09

Entre las hojas
de un libro
está el deseo incontenido
de un sin nombre,
como minúsculos
espasmos
de silencio,
que se concentran
impiadosos
en los devoradores
ojos
de quien lee.
Y serpenteando
lo real con lo mentado,
lo mundano
y lo sublime,
se redime
el hacedor
de sus pecados,
se sepulta
entre sonidos
que desafían
al monstruo
del olvido.
Ya nada será
lo mismo
cuando
el papel
se aniquile,
cuando
de palabras
sin cuerpo,
cuando el olor
a tinta
sea un recuerdo.


Cintia Ceballos

domingo, 5 de julio de 2009

EL ALA TRÉMULA E INCÓLUME DE TU MARIPOSA

El ala trémula
e incólume

de tu mariposa
me envuelve
en abanicos
de colores
y sabores.
Y aparto de
entre todos
los silencios
aquellos
que no logro,
que se pierden
en el resplandor
sutil de la palabra.
Y aún cuando
tu vuelo me seduce
elijo no mirar
y descansar mis ojos
tras el velo de piel
que se interpone.
Te cansas de volar
y a mitad de la noche
espolvoreas
tu color sobre
mi almohada,
y el laberinto
de iris miel
sigue escondido
tras la puerta,
aquella que pincela
con su roce

el ala trémula
e incólume


de tu mariposa.


CINTIA CEBALLOS 13-7-09


miércoles, 1 de julio de 2009

GRILLETE. 1-07-09.

El que se aferra
a tu maltrato,
como rocío
a la gramilla
sabe que tarde
o temprano
destina su presencia
a perecer.
Prevalece tu imperio
y doctrina
a sus propios deseos
y creencias,
y contemplando
el firmamento oxidado
de la noche
implora tu clemencia
y ansia tu ternura,
pero ignora lo amarga
y despiadada
que tu alma
sabe ser.
Te quedarás dormida
y el sudor del sexo
errante
será el que carcoma
tus entrañas,
y aunque te envuelva
en el final
un halo de conciencia
que remiende
con parches
los errores,
quedarán tus ojos
cegados de dolor
y tu piel
se esfumará
con el mínimo
roce
de la luna y el sol
del día y de la noche
como polos puestos
que marcarán
tu comienzo
y final
en el chasquido
inaudible
de dos dedos.

Cintia Ceballos