sábado, 20 de junio de 2009

Construyendo silencios. 21-6-09

Matando la obviedad
a modo de combate
y contrariando mi inercia,
me entrego a las pasiones
más mundanas
y a los placeres corroídos
y mezquinos.
Interpretando tus silencios
y la manera de construirlos
siento que me hundo
aún cuando creía
haber tocado fondo.
Y me obligo a repetir
el instante,
a padecer los tormentos
que dibuja tu mente
retorcida y enferma,
comprendiendo
que carezco de cordura
plausible
y que prefiero el destierro
de tus labios
antes que el olvido.
Me visto para un funeral
y no me está permitido
ni llorar al muerto,
entonces trago
mis lágrimas,
elogio la ceremonia
y la majestuosidad
del féretro.
Y admitiendo
la distancia que mora,
me voy con la frente
en alto
mascullando tu nombre
y mi tormento.


Cintia Ceballos

miércoles, 10 de junio de 2009

POR ÚLTIMA VEZ. 10-6-09

Si supiéramos
que el tiempo
se detiene en este instante,
con la única certeza de
que cada palabra dicha
de haber sido silencio
nos hubiera mutado.
Si supiéramos
dónde dejarán los ojos
la mirada
y nuestros dedos
sus huellas
por última vez.
Si supiéramos
que de cada camino recorrido
algo nos guardamos,
como amuleto o souvenir
y que ciertamente
también hemos dejado
en nuestro andar meritorio
o comprimido.
Si supiéramos
que casi nada sabemos
y nos vamos de este mundo
olvidando mucho
de lo que traíamos al nacer.
Quizás andaríamos con lo puesto
no por miedo a perder
sino por sentirlo
necesario.
Quizás prestaríamos atención
a todo lo que miramos
decimos, sentimos
y tocamos,
porque nadie sabe
cuando se enciende
la luz
por última vez.

Cintia Ceballos


jueves, 4 de junio de 2009

DE SABERES. 4-6-09

Los saberes adquiridos
por esos libros
que nunca conocieron
el papel,
se vuelven relevantes
a medida
que quebramos
los conceptos.
Y cuando la quimera
se confronta
con las dudas
del momento
en un batalla cruenta
y despiadada,
nos atrincheramos
sin conciencia
o con ella,
hasta que todo pase
y no quede otra alternativa
que aferrarse
a la que sobrevivió,
llena de cicatrices
pero entera aún.
Los saberes adquiridos
sin títulos
ni autorías
son los que prefiero
tomar como lazarillos
y dejarme guiar por ellos
cuando la luz se vuelve
imperceptible,
cuando el temor
todo lo cubre,
cuando de decisiones
sin certeza
se trata.
Y quién te dijo a vos
que de saberes comprobados
a ciencia,
no hay nada que objetar,
cuando tu propio instinto
te dice lo contrario.


CINTIA CEBALLOS