¿Pensaste alguna vez
en ese pequeño ser
que transita de la puerta
a la ventana
vistiendo el color de la pared
para que nadie lo vea?
Es que el miedo
nos lleva a camuflarnos...
¿Lo has visto alguna vez
besando con sus patas
el verde húmedo del césped,
mutando su color,
mimetizando?
Es que el miedo
nos lleva a camuflarnos...
¿Has visto alguna vez
la urbe confundirse con
el resto?
¿Has visto que el color
se repite a menudo
en las vidrieras?
Vida que por ser única
e irrepetible
nos aterra,
¿Pero has notado
que el miedo
no se va aunque
nos atrincheremos
rodeados de otros
cuerpos,
de otras vidas?
Ese pequeño ser
que transita
de la puerta
a la ventana,
se me parece,
también visto
el color de la pared.
Ahora...
¿Puedes creer
que realmente
nadie lo verá?
Cintia Ceballos
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y es que ese ser que no se ve, que se pierde entre el color de las paredes somos nosotros mismos. nada más que el límite y el comienzo de todo. es ironico lo que nos pasa estando vivos no? el mejor de los saludos y aprovecha estas 365 nuevas oportunidades
ResponderEliminarHola!!! gracias por tu paso por aquí y tu tiempo para leer, la reflexión, un gusto enorme y mis saludos. Cin
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